Es casi de obligado cumplimiento que para entender las publicaciones y reflexiones de alguien que suele escribir entre líneas con el fin de llegar al Alma (en este caso mi persona), es importante conocer y tratar a esa persona para saber los aspectos de su carácter, personalidad, esencia y energía.
En mi caso la mezcla de humor, cinismo y sabiduría me ayuda a conectar con la parte más sutil y pura de los Seres.
Muchos conectan con esa energía en forma de palabras y son capaces de sumergirse en la complejidad y profundidad del mensaje.
Muchos otros se quedan en la superficie, peleándose con sus propios lastres y agotando sus fuerzas entre sus paradigmas y la lucha por seguir a flote.
Está claro que intentar descifrar los mensajes de un emisor que es desconocido para aquél que desea comprender, es como lanzar piedras al aire con el fin de alcanzar la luna.
El humor es un signo de inteligencia en tanto a que demuestra una perspectiva ligera y clara de la realidad y ayuda a soportar las más pesadas situaciones y las más dolorosas de las experiencias. El hombre o mujer que torna el mundo en risa, en gozo, está ejecutando una dinámica de no tomarse demasiado en serio el mundo porque de hecho sabe que su caminar por la Tierra no es más que un erasmus temporal.
Tener la capacidad de despertar el sentido del humor es la puesta en escena de una de las capacidades más amenas para entender correctamente un principio de la realidad y el mejor de los remedios para llegar al corazón.
Prof. Denis Astelar
www.academiahermes.com
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