Los Principios Universales no son un concepto de la Nueva Era, ni una moda o invento. Son una ciencia tan antigua como el Universo mismo, algo que se enseña y estudia.

El Principio de Atracción nos explica que la energía siempre atrae a la energía semejante y que todo aquello en lo que te concentras lo atraes, lo alimentas sin cesar una y otra vez.

Cada átomo de tu cuerpo está constantemente respondiendo a los impulsos de tus emociones y por supuesto a los pensamientos que se crean en tu mente, ya sean positivos o negativos, modelando la realidad que experimentas en tu vida.

La buena o la mala suerte no es más que el Principio de Atracción en acción.

Siguiendo durante mucho tiempo con este tipo de emociones y pensamientos, obtendrás más de aquello que en ese momento tengas en mente, entrando en un círculo vicioso que influirá en tu vida hasta que cambies la calidad de tus pensamientos. Imagínate cuántos millones de personas en este momento están sufriendo sin darse cuenta por los efectos de sus malos pensamientos, debido a sus hábitos inconscientes de atracción.

Si estudiamos un poco mas a fondo cómo se desarrolla la evolución de los individuos, nos daremos cuenta de que la gente atrae aquello en lo que más se concentra o aquello a lo que más temor tiene debido a la gran cantidad de energía invertida en determinados pensamientos.

Ya sea inclinándonos hacia criticar lo malo o apreciando lo bueno, así serán los resultados que obtendremos en forma de eventos, circunstancias, oportunidades y experiencias en nuestro entorno.

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A través de este seminario entenderemos qué es lo que "falla" en el uso y la mecánica de este principio y qué herramientas podemos usar para comprender por qué razón no se manifiesta en tu vida aquello que deseas.